En el sur, situado en una vasta isla, se encuentra Neovibes, un próspero reino humano cuya soberanía está en manos del astuto y temido Boss DM. Este líder se alzó al poder gracias a su sagacidad, experiencia y conexiones en el bajo mundo. Aunque mayormente habitado por humanos, en Neovibes conviven diversas razas inteligentes de todos sitios, reflejando una sociedad comprometida con la igualdad y el progreso tecnológico. El paisaje urbano de Neovibes es de estilo futurista, donde los ciudadanos se desplazan en una variedad de vehículos, tanto privados como públicos, estos últimos gestionados por el gobierno.
La ciudad está repleta de negocios de todos los sectores, desde el entretenimiento hasta los servicios financieros, y cuenta con una red de datos propia basada en ondas electromagnéticas, facilitando la comunicación entre los habitantes a través de dispositivos electrónicos. Sin embargo, a pesar de estos avances tecnológicos, Neovibes se ve afectada por crisis económicas y conflictos internos sin sentido, en gran parte debido a la corrupción en las altas esferas del poder.
El líder es elegido democráticamente por el pueblo, aunque las campañas electorales a menudo ceden a las demandas populares en lugar de priorizar el bienestar de la nación. La contaminación es otro grave problema que afecta a la escasa vida silvestre de la región y a la salud de sus habitantes, muchos de los cuales sufren enfermedades respiratorias y dependen de medicamentos para combatir sus efectos.
Las empresas, en su afán de mantenerse competitivas, agotan los recursos naturales de forma desmedida, contribuyendo al deterioro ambiental. Todo indica que Neovibes está encaminado hacia el declive, a menos que se produzca un cambio drástico en su estilo de vida y enfoque hacia la sostenibilidad y la ética empresarial.
